miércoles, 27 de octubre de 2010

Primera semana

Ya llevamos una semana en Red River Gorge y los días mejoran por momentos. Comenzamos las vacaciones en Nueva York, una ciudad impresionante (creo que es el mejor adjetivo para definirla, aunque no le hace justicia ser definida por uno sólo). Pero ver la ciudad en sólo tres días y después de una viaje tan largo, no es lo mejor para apreciarla. El primer día fue un poco agotador, habíamos estado la noche anterior sin dormir, llegamos allí y eran seis horas antes… en fin, que nuestros últimos paseos por sus calles, los pies andaban solos y sólo veíamos el momento de llegar al hotel. Los dos días siguientes fueron mejor. El Empire State es un edificio enorme y perfecto, tiene algo mágico ya que cuanto mas lo ves, más te gusta y más bonito parece. La ciudad al completo tiene algo que engancha, que hace que quieras volver… un placer haber estado allí.

Pero es aquí, en Red River donde me estoy sintiendo realmente bien. ES un sitio precioso. Todo el condado está repleto de bosques inmensos, mil colores, mil sonidos, caminos encantados que descubren paredes mágicas… un lugar de ensueño. Relacionarse con los lugareños no es lo más común, la zona está repleta de escaladores y es con éstos con quienes, al final, terminas conviviendo, eso sí, escaladores de todas partes del mundo. El motel donde nosotros estamos alojados está muy bien situado, el dueño es una persona muy agradable y la casita es muy acogedora (Li’l Abner Motel). En cuanto a la escalada, ejem… estamos escalando muchísimo, de momento el tiempo es perfecto, calorcito por el día y más fresco a ultima hora, así que estamos aprovechando todos los días. La roca es muy diferente, es arenisca y si no estás acostumbrado a escalar en este tipo de roca, cuesta fiarse de los cantos, muchos tienen arena que la pared va soltando, pero esto mismo hace que no haya vías pulidas. Los cantos son muy divertidos; las placas muy exigentes y técnicas, nada que ver con lo que yo estoy acostumbrada a escalar y los desplomes ¡buf! ¡¡¡¡¡súper exigentes!!!!!, pero vas subiendo por ellos y cada canto te sorprende, regletas impresionantes, romos con muchísima adherencia, agujeros divertidos…
El problema es que yo, todo lo que hago en mi vida, lo hago por sensaciones. Conozco a las personas y me crean sensaciones, conozco lugares y me crean sensaciones y, por supuesto, escalo en diferentes paredes y me crean sensaciones; y hasta que la sensación no es de equilibrio, tranquilidad, bienestar y de adaptación total entre mi ser y el ambiente, no consigo darlo todo de mí. Por eso, ha sido en estos últimos días cuando me estoy encontrando, por fin, conmigo misma. Después de una primera semana, en la que me costó mucho adaptarme a la pared, hoy he vuelto a escalar disfrutando cada movimiento y es una sensación maravillosa que todo lo que valoro de los viajes esté por fin equilibrado: dani es el mejor compañero de viaje que puedo tener, estamos conociendo personas muy interesantes y el lugar es el mejor destino que pueda imaginar.
Seguiremos disfrutando del viaje.
(Aunque estando tan lejos, se recuerda mucho lo que queda en casa)

miércoles, 13 de octubre de 2010

GO TO U.S.A.

Hace un par de años, Dani viajó a la parte este de EEUU a escalar. Contaba maravillas de la escuela de escalada y volvió entusiasmado con la “capital del mundo”. En mi lista de viajes, la verdad es que ir a Nueva York no estaba entre los primeros, pero después de ver las fotos, escuchar las historias que nos contaron y verles esa sonrisa cada vez que recuerdan el viaje, fue ascendiendo posiciones.
Este año, vuelve a presentarse la oportunidad de viajar y esta vez puedo unirme al viaje. Hay tantas cosas, lugares y gentes que conocer, y tan poco tiempo para poder disfrutarlos todos, que debemos aprovechar las oportunidades que tenemos.

Destino: Red River Gorge!! Una de las mejores escuelas de escalada del mundo según muchos escaladores, cientos de vías de una roca excelente e inmersa en un ambiente fanático. ¡Qué ganas de llegar! Y como no podía ser de otra forma, parada obligada en Nueva York. Debe ser impresionante ver todos esos rascacielos, las tiendas enormes llenas de todo tipo de cosas, pasear por las calles por las que pasean los actores en sus películas… (esa fotito en lo alto del Empire State como en Algo para Recordar)
Estos últimos días antes de marchar, la vida aquí está siendo mucho más intensa. Tengo la sensación de percibir cosas que antes ni siquiera llamaban mi atención; miradas llenas de significado, sonrisas mágicas, tonalidades y detalles en lugares que frecuento y que hasta ahora no me inspiraban ningún cariño especial… Es interesante ver cómo las personas, muchas veces, apreciamos esos pequeños detalles del día a día y que siempre están ahí, cuando vamos a marcharnos o sabemos que tardaremos en volver a verlos. Y eso que sólo me voy de vacaciones!!
Estos días, más que nunca, mi pequeño “cuaderno de bitácora” va a ser la mejor forma de expresión; momentos felices que querré compartir y esos pequeños momentos de nostalgia, que me acompañan en los viajes, en los que necesito sentir el contacto de la gente que queda aquí.
Hasta pronto!!